UN DEJAR IR COMPLETO
- Hnasmdro
- febrero 28, 2022
- Experiencias MDR
- 0
- 386
“Y ella respondió SI iré; me iré a la selva”
La Beata Ascensión Nicol fue una mujer de fe y confianza. Ella era muy silenciosa en sus palabras y acciones. Su primera llamada fue para ser monja religiosa de claustro. Dedicó toda su vida al servicio de Dios en el convento durante muchos años. También enseñó en la escuela durante más de 28 años. Sin embargo, su deseo de servir a los más pobres no tenía límites. Fue una crisis tan grande para las hermanas de Huesca cuando el gobierno quiso tomar la escuela. Sin embargo, la fe y la confianza en Dios de la Beata Ascensión Nicol le ofrecieron una nueva vida, una llamada misionera. ¿Cómo se siente ir a la selva después de enseñar durante 28 años?
Creo que sería una decisión tan difícil, si la hubiese tenido que tomar yo, pero no para la Beata Ascensión. Enseguida dejó todo en las manos de Dios y dijo SÍ me voy, me voy a la selva. ¿Por qué le fue posible decir “Sí” tan fácilmente después de escuchar el sufrimiento de los pobres del Padre Zubieta? Yo diría que fue su amor por Cristo lo que la conmovió. Su espíritu misionero se despertó en el arte de su escucha. Escuchó los sufrimientos de los pobres. Escuchó sus gritos y dolores. Sintió su necesidad en silencio. Dejó totalmente su carrera docente y siguió a Cristo para estar en la tierra de los indígenas. ¡Debe haber sido difícil para cualquiera dejar la escuela después de enseñar durante muchos años y ser enviado a la selva!
Yo creía que el llamado de la Santísima Ascensión era un llamado de su fe y amor. Fue el amor lo que la movió, es por eso que celebramos nuestra fiesta el 05 de octubre por 103 años. Por eso, se le llama “Beata Ascensión Nicol”, como dice San Pablo, “Si hablas muchas lenguas, ten fe para mover montañas, pero si no tienes amor, no eres nada”
Mientras reflexiono sobre la vida de Ascensión, encuentro una mezcla de alegría y tristeza. El gozo es que cuando le das todo a Dios, encontrarás a Dios en todo. Siento pena cuando veo que nuestro mundo moderno ha cambiado de cultura. En lugar de aprender a entregar totalmente nuestras vidas, estamos totalmente apegados. A veces, elegimos ir a los lugares que queremos, a la misión que nos gusta. Hoy es el llamado urgente para que despierte mi espíritu misionero que es ir a donde sea que me envíen. Para guardar silencio como Ascensión Nicol cada vez que encuentro problemas o dificultades porque Dios está a mi lado siempre. Confiaré en Dios totalmente y no en mis capacidades, pues nunca me sentiré sola, ya que si es Dios quien me llama, sé que es fiel y hará todo por mí.