MI BREVE HISTÓRIA DE LA VOCACIÓN DOMINICA

Queridas hermanas comparto con ustedes y con alegría, la breve historia de mi vocación, sin embargo no siempre es fácil hablar de una misma. Naci en el seno de uma familia cristiana con diez hijos, incluyendo seis niñas y quatro niños. Yo soy la novena de diez.

Fue en 2004 cuando conocí las Hermanas Misionarias Dominicas del Rosário a través de una aspirante llamada Mireille BITAKA, cuando ella fue al Ecuador para el funeral de su hermana. Mireille me habló que las MDR eran hermanas abiertas, alegres, simples, que acojen a las jóvenes con sus cualidades y defectos y que trabajan en los cinco continentes; y me dio el teléfono de la hermana responsable por las jóvenes vocaciones de la Provincia. Fué así que empecé en esta gran familia como Aspirante.

De 2006 a 2009 hice el Postulantado y de 2009 a 2011 participé en el Noviciado. En el día 8 de agosto de 2011 hice mi Primera Profesión. El día 3 de noviembre de 2018 me comprometí definitivamente con la Congregación. Hice toda la preparación en República Democrática do Congo.

Durante mi camino, siempre he experimentado el amor de Dios en mis hermanas que, diariamente, me aceptan como soy y me ayudan a crecer juntas en el amor de aquel que nos llamó a todas. No puedo también olvidar el apoyo de mi familia biológica y de otras personas, que me ayudan a superar las dificultades inherentes a la vida religiosa.

Durante mis 14 años de vida religiosa, procuré permanecer abierta al carisma de la Congregación que nos envía donde la Iglesia necesita de nosotras, en la simplicidad, en el amor por lo que hago y por aquellos que conozco, dando lo mejor de mí; porque hay más felicidad en dar que en recibir (Act 20,35).

Irmã Ikoli Bokanzu Francoise

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