ELEGI…
- Hnasmdro
- septiembre 25, 2024
- Experiencias MDR
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Muchas Gracias, Señor, por llamarme a esta preciosa vocación, por haber sido mi todo en este camino grande pero una vez torcido. Elegí seguirte porque sé que me cuidas sin expectativas, mi corazón es lo único que quieres. Elegí quedarme contigo porque sé que la verdadera paz sólo se encuentra en tu presencia. Te elegí para amar porque sé que me amas más de lo que yo me amo a mí mismo. Elegiste perdonarme, aunque caigo a menudo con los mismos pecados. Elegiste quedarte y esperar incluso cuando huía de ti porque sabes, que nunca encontraré ningún lugar perfecto, ni en las cosas, ni el amor que satisfaga mi corazón, porque me has quitado uno de sus pedazos y sabes que volveré a ti y me quedaré quieto.
Alguna vez me pregunté: «¿Por qué tengo que quedarme quieta en esta vida incierta?». Pero, al mirar atrás, el amor que tengo, la vida que disfruté, lo precioso de mi ser, me doy cuenta de que tu amor hace que mi vida sea segura y decida quedarme quieta. Porque en esa quietud, sé por qué y dónde estoy, a quién sigo, a dónde pertenece mi corazón, dónde encontré la verdadera paz. Encuentro la curación de las heridas del pasado y el perdón de mí mismo. Todo, debido a Tus innumerables gracias y bendiciones a través de otros con quienes viajo, ya que son ángeles en el camino.
Mi gratitud va a nuestras familias, amigos y compañeros de la tanda 2022-2024, las hermanas de esta Congregación de Misioneras Dominicas del Rosario. Mis saludos de paz y agradecimiento a mi memorable hogar (Noviciado Continental Asiático) que me había sostenido durante 2 años, un hogar de amor para crecer en la gracia de Dios. Un agradecimiento especial a nuestras queridas formadoras del aspirantado, postulantado y noviciado porque su servicio ha ayudado a dar forma a nuestras vidas y añadir colores a la vida. Verdaderamente, han tocado nuestra vida y las de los demás también y nos han hecho compañeras en este viaje.
A las hermanas Fátima, Rosa y Pushpa les agradezco su servicio desinteresado para los jóvenes, el tierno cuidado, la alegre aceptación, su amor creó recuerdos en nuestras vidas al dedicar tiempo de escucha, de compartir y rezaron con nosotros. Esas palabras y acciones nos iluminaron como en la fórmula de la profesión: «entrega y servicio». De hecho, esos saludos de Felicitaciones que recibimos van para ustedes también, porque han hecho un gran trabajo para Dios acercando a otros a Él, para que puedan disfrutar de Sus gracias en todos los servicios que están haciendo.
Guilhermina D’Silva
Provincia San Luis Beltran