COMPARTIENDO
- Hnasmdro
- junio 20, 2022
- Experiencias MDR
- 0
- 494
Desde la tierra de los mojeños y trinitarios, en San Ignacio de Moxos, departamento del Beni-Bolivia, donde siento que Dios me ha llamado a insertar mi vida como Misionera Dominica del Rosario, cumpliendo el sueno del Centenario de la Congregación: “buscar nuevos Maldonados”. Con una exuberante vegetación, una tierra rica en espacios espirituales y culturales. Con un sinfín de colores y sonidos, propios de la amazonia; Llega también el grito de unas poblaciones que claman por ser respetadas y asumidas en su originalidad. Ellos y ellas siguen buscando su “tierra prometida”, su “loma santa”, donde los indígenas encontrarán todo aquello que el avasallamiento de otros pueblos les quitó: la libertad y seguridad material. Su sueño es vivir en su propio suelo, en su propia administración y esto consiste en tener suficientes alimentos, ropa y herramientas. Un sueño muy pequeño podríamos ver desde otras mentalidades; sin embargo, muy valido para quienes se les ha conculcado hasta sus raíces.
Desde esta tierra hermosa, donde he cumplido un mes de “recién llegada” me atrevo a compartir mi corta vivencia. Alcancé este suelo un fin de semana, después de un largo viaje desde Santiago de Chile. Atravesé la cordillera de los Andes, el lago Titicaca y el rio Mamoré, para anclar en San Ignacio de Moxos y encontrar a mis hermanas de la Comunidad la Trinidad, viviendo el sueño de nuestra Beata Ascensión Nicol y de Ramon Zubieta, estar con las personas mas vulnerables y darles a conocer al Dios del Amor, con compromisos concretos.
Desde la solidaridad con los adultos mayores, la formación escolar para niños y adolescentes, el acompañamiento a los animadores de comunidades rurales y urbanas. El apoyo logístico a las personas que necesitan ser reconocidos como parte de un territorio, voy haciendo camino en el día a día y como Rut, me comprometo con esta realidad diciendo como ella “tu pueblo será mi pueblo. Tu Dios será mi Dios” (Rt.1,16).
Hermana Edith Ponce
Comunidad San Ignacio de Moxos
Bolivia.