57º ANIVERSARIO DEL MARTIRIO DE NUESTRAS MÁRTIRES
Muy queridas hermanas:
Hoy celebramos el 57º aniversario del martirio de nuestras hermanas, Buen Consejo, Cándida, Olimpia y Justa.
El amor verdadero lleva la marca de la sobreabundancia y el exceso. Por eso la fidelidad hasta el extremo, hasta las últimas consecuencias, fue el rasgo distintivo de la vida de nuestras hermanas.
Así lo expresa bellamente Lola Arrieta, CCV en el Cuaderno nº 98 de Frontera Hegian: “Amor célibe en modo cuidado. Una reflexión desde la vida para alentar en el camino del seguimiento de Jesús”.
Transcribo a continuación el texto de este Cuaderno que deseo nos ayude a hacer memoria de nuestras hermanas mártires:
“El amor célibe lleva la marca del exceso…
“Lo que debería caracterizar la existencia del consagrado es la certeza de que nuestras vidas ya están entregadas y nuestras existencias ancladas en un futuro que no poseemos, que tantas veces sentimos lejano y del que incluso podemos llegar a dudar, pero que ya está dado” (Martínez-Gayol,N y Uribarri,G: Raíz y Viento. La vida consagrada en su peculiaridad).
Cuando se nos ha regalado poder entregar la vida a fondo perdido ya no hay nada que perder… ya no hay fondos reservados, ocultos en alguna parte de nosotros mismos que nos hagan vivir temerosos, avergonzados e inseguros. Esta entrega de la vida es una cuestión de Amor.
“Certeza de que nuestras vidas ya están entregadas”
Es decir, se nos habla de vivir desde una fe confiada por el amor sentido. Por la Presencia vislumbrada que atrae y hace arder el corazón (alegría), por la energía que permite responder al amor con el amor (libertad).
“Nuestras existencias ancladas en un futuro…”
Se nos remite a una fe esperanzada. Aquella que permite “experienciar” la confianza en Dios cuando todo invita al desánimo. Permite atravesar el miedo y seguir confiado. Reaviva la memoria del deseo de felicidad que nos constituye. Con ello se reafirma la certeza de que son posibles “unos cielos nuevos y una tierra nueva”.
“Entregada la vida a fondo perdido ya no hay nada que temer”
Se identifica al amor como el causante de este efecto benéfico en la vida de una persona. Es el Amor, es la relación Tú-yo, Nosotros…Relación que deja nacer, crecer, ser. Relación siempre dichosa.
“Ya no hay fondos reservados”
…Si se ha hecho el camino de la reconciliación con uno mismo, no hacen falta.
Si se nos hace posible aceptarnos en nuestras fortalezas y debilidades ¿no resulta un gasto innecesario invertir en seguridad personal? Si el camino al corazón se ha hecho hábito en nuestra vida. Si desde ahí podemos procesar todo lo que vivimos en equipo con el Espíritu ¿No será más productivo invertir toda la energía en el proyecto mismo del amor? Y en esta situación ¿cómo no decir que estamos practicando el modo cuidado en el amor?
Todo lo dicho no se hace de una vez por todas, es proceso, es camino.
Es el horizonte al que hemos sido llamadas y llamados.”
Lola Arrieta CCV
Feliz día de Nuestras Hermanas Mártires del Congo
Nuestras hermanas Buen Consejo, Cándida, Olimpia y Justa vivieron desde la certeza de que sus vidas ya estaban entregadas y pudieron responder al Amor con el amor.
Que el “exceso” sea la marca de nuestro amor y seamos, como ellas, mujeres valientes, apasionadas por Jesús, de gran fortaleza interior y sembradoras de esperanza.
Un abrazo con cariño.
Hermana Raquel Gil
Coordinadora General MDR.