Todo el que crea tendrá vida definitiva
La Buena Noticia Jn. 3, 14-21
Todo el que crea tendrá vida definitiva
Dios nos ofrece calidad de vida, vida plena, no sólo en el más allá, sino aquí. El Espíritu que Dios nos comunica es la fuente de alegría permanente.
Dios con Jesús nos trajo la salvación para todos. Con Jesús se acabaron los privilegios.
La salvación que Dios nos ofrece es VIDA, viene de Dios que es VIDA, es DON GRATUITO e INCONDICIONAL, es ABSOLUTO, TOTAL, exige una ADHESIÓN a JESÚS y se manifiesta en OBRAS.
La salvación no viene de fuera, sino que surge de lo hondo de nuestro ser. Desde esa presencia de Dios en mí, hace posible mi plenitud, mi salvación. Es decir, me salva Dios y me salvo yo.
La acción de Dios y la nuestra se suman, se juntan. “Dios que te creó sin ti, no te salvará sin ti” (San Agustín). Todo lo que depende de Dios ya lo ha hecho y me llega a mí en cada instante. Mi salvación depende de mí.
La salvación es descubrir el tesoro que está escondido dentro de mí y disfrutar de él. “La vida eterna consiste en que te conozcan a ti, único Dios verdadero y a tu enviado Jesucristo”. Cuando esto suceda en nuestras vidas, toda relación con los demás, con la creación entera será desde el amor.
