LIDERAZGO DESDE LA NO VIOLENCIA

El día 22 de noviembre tuvimos el último encuentro como hermanas de la primera etapa de América Latina y el Caribe, participamos cerca de 40 hermanas y cerramos con broche de oro con la ponencia de Mónica Maher, quien nos compartió el tema de liderazgo desde su experiencia de trabajo por la paz en diversos países de América Latina y el Caribe.

En este tiempo de la pandemia ha subido un 40% de violencia contra la mujer y contra los niños, hemos visto también cómo los Huracanes han afectado a más de 9.000 millones de personas en diversos países de Centro América.

 

 Toda esta realidad nos hace constatar que Las desigualdades se van haciendo cada vez más severas. Con mi equipo cuando empezó la cuarentena nos preguntábamos qué podíamos hacer. Como no podíamos salir, algunos decían que no podíamos hacer nada. Pero nos preguntamos si pudiéramos hacer algo ¿qué haríamos?  la imaginación es un punto muy importante en la teología feminista, la imaginación comienza a mover la energía y la creatividad, primero empezamos a entregar comida, mensajes de paz, luego a organizar huertos comunitarios, entregar semillas. La imaginación está basada en la memoria ancestral que estamos recuperando, las inspiraciones desde la espiritualidad indígena, de cultivo y respeto por la madre tierra.

 

 En este tiempo nos preguntamos qué quiere Dios de nosotras en este tiempo, y la Biblia nos dice ¿Y qué es lo que demanda el Señor de ti, sino solo practicar la justicia, amar la misericordia, y andar humildemente con tu Dios? (Mq 6,8)  o sea amar, ser compasivas y practicar la justicia. Nos ayuda recordar como dice Ibon Guevara que también vivimos resurrecciones diarias, estamos llamadas a vivir la salvación como una serie de salvaciones, aprovechar esos micro momentos. Como mujeres, desde la compasión ponemos en acción la ternura.

 

Estos gestos de ternura son acciones valientes de solidaridad, la gente hoy en día se está salvando gracias a la solidaridad entre ellos, ya no espera nada de los gobiernos, el lema regresa SOLO EL PUEBLO SALVA AL PUEBLO.

 

Comparto una experiencia de la misma Geraldina, luego del huracán ETA iban con comida y ropa para las familias y vio a una niña que se ahogaba y no dudó en lanzarse al agua para salvarla, y salvó a la niña llamada esperanza, aunque su celular se dañó, pero la vida venció.

 

El amor a veces al prójimo es más fácil que a personas difíciles, para enfatizar que nuestra tradición nos dice amar al prójimo y también al enemigo. Mateo nos dice: “Yo los envío como ovejas en medio de lobos; por tanto, sean astutos como las serpientes e inocentes como las palomas”. Hay contextos de mucha violencia y hay resistencia y no todo el mundo va aceptar el amor que ofrecemos. Necesitamos la sabiduría para que sea una compasión muy sabia, el amar al enemigo y bendecir al enemigo a los que causan sufrimiento, hacer el bien a los que nos odian y orar por quienes nos persiguen.

 

La filosofía de la no violencia nos dice que hay un poder en el amor y en la bondad que es transformador, que cambia a las personas, que no podemos responder de la misma forma. Llevar el amor y la sabiduría en contextos difíciles.

 

He vivido en mi experiencia situaciones muy duras, feminicidios de colegas, y descubrí que tenía que hacer algo más. De repente tuve oportunidades de entrar a la cárcel de hombres en México y Honduras, como había tenido colegas asesinadas era muy fuerte el contactarme con hombres que en ese momento eran para mí el enemigo. Las estadísticas dicen que un porcentaje alto de hombres violentos, es porque ellos sufrieron violencia en la infancia, esto no es justificar, pero sí comprender y transformar esta situación. Muchos de ellos se han transformado en facilitadores en el programa de la no violencia.

 

Por las experiencias en las cárceles empecé a trabajar la no-violencia y los conflictos, son herramientas como crear ambientes seguros para transformar la violencia.

 

El programa de construcción de la paz se parte de principios espirituales, en cada persona hay una luz y se crea un espacio donde pueda salir esa luz, las personas tienen que venir con su propia voluntad, es experiencial, aprendemos unos de otros, hacemos ejercicios, juegos.

 

En Colombia, aplicamos el programa desde la comunicación no violenta, confianza, resolución de conflictos, conectamos con el poder transformador que puede ser el amor de Cristo, es un poder que existe en cada persona y que puede transformar la violencia hacia la no violencia y es una experiencia muy constructiva. Los principios son respetarme a mí mismo, cuidar al prójimo, esperar lo mejor de cada situación, pensar antes de reaccionar, tomarnos tiempo, conectar con la intuición y buscar una solución no violenta.

 

Los pasos que trabajamos en este proceso son:

 

  • Tratar de resolver los conflictos buscando algo en común con la otra persona
  • Trate de alcanzar ese algo que existe en toda persona y que desea el bien para si misma y para el prójimo.
  • Escuchar, cada persona está en un viaje por la vida, trate de comprender y no juzgar.
  • Asegúrese de basarse en la verdad
  • Manténgase dispuesta a modificar su posición si descubre que no es justa.
  • Tenga confianza de que sentirá un poder interno para actuar
  • No espere que esta respuesta le resguarde del peligro, si no puede evitar el peligro sea creativa y evite la hostilidad.
  • El humor y la sorpresa pueden ayudar a cambiar la situación
  • Aprenda a confiar en el sentir interno que le dice cuándo debe actuar y cuando debe abstenerse o retirarse.
  • Busque nuevas maneras de enfrentar la injusticia manténgase dispuesta a sufrir el rechazo o la persecución.
  • Sea paciente y persistente en la lucha por la justicia
  • Ponga de su parte para forjar una comunidad basada en la honradez, el respeto y la compasión.

No estamos solas, estamos en comunidad, siempre podemos buscar ayuda para sanar el dolor, a nivel práctico es muy importante creer si alguien nos dice que está en una situación de violencia y apoyarla.

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